¿Es usted una persona de mente abierta?

Tener mente abierta, o ser "open-minded", es una valiosa virtud; para un líder resulta crucial. Pero ni todo aquel que se jacta de ser "open-minded" en verdad lo es, ni es muy fácil explicar en qué consiste serlo. Investigaciones recientes han ligado el tener mente abierta con la "humildad intelectual", una disposición a cambiar las propias creencias aunada a la sabiduría de cuándo hacerlo y cuándo no. Pero ¿se podría medir de algún modo este tipo de humildad y con ello poder desarrollarla de manera más cabal? La respuesta es afirmativa. Se ha considerado que hay cuatro aspectos mensurables que componen a la humilidad intelectual: 1) Respetar las perspectivas de los otros; 2) No sobreestimar el propio intelecto; 3) Separar al ego del intelecto; y 4) Tener disposición a revisar las propias perspectivas. Este análisis ha resultado muy revelador, sin embargo, una pieza parecía faltar. Algunos filósofos han considerado que esa pieza es la "curiosidad" para escuchar a los otros y "explorar" nuevas experiencias. ¿Cómo se logra esto? No hay una sola manera, pero algunas de ellas son conocer otras culturas y modos de vida viajando, leyendo, explorando los laberintos de la propia mente y la atención (con técnicas como el Mindfulness). Podemos hacerlo, en nuestro día a día, auto-desafiándonos como lo hacía Benjamin Franlkin al emitir una opinión, expresando de entrada que "podría estar equivocado". ¿Estaría usted dispuesto a ello?

Referencia:

• Shane Snow. (Noviembre, 2018). A New Way to Become More Open-Minded. En Harvard Business Review.